Al pie del campanario: Una nueva esperanza
Un grupo de amistades, entre hombres y mujeres, aparece caminando, doblando desde Puente Bolognesi e ingresando por debajo de los arcos que soportan un largo edificio construido en piedra, conocido como Portal de San Agustín.
En tanto voy contando los segundos que están demorando en llegar las primeras ondas de la pirotecnia, me siento aliviado porque ella podría estar caminando entre esa masa, tan ansiosa por verme como yo lo estaba por ella.
Como hay más de cien metros desde la catedral hasta el final de los arcos, y las columnas del edificio son voluminosas, no alcanzo a reconocer el rostro claro y de ojos negros de mi amor, entre esa pequeña multitud. El conjunto avanza hacia la catedral, en donde yo me encuentro, sólo que lo hace con tal lentitud, que parece una procesión; ruidosos todos ellos, disfrutan la noche, la vida y la juventud.
Junto a ese gentío, un perro callejero ladra y salta alegremente, quizá alguno del grupo le dio un bocado o acariciaron su cabeza, con ese cariño que sólo los amantes de las mascotas pueden mostrar.
El resto de la plaza guarda silencio, sólo entre la bandada conversan animadamente, mientras yo contengo el aliento, deseando que por fin se realice el encuentro.
Al menos son diez, pero una de las jovenes —particularmente— llamó mi atención, es de estatura pequeña, cabello negro no muy largo, su vestimenta no combina colores llamativos, entre todos es la que se muestra más tranquila. Pero por más que me esfuerzo en divisarla, no alcanzo a reconocerla.
Pruebo nuevamente marcando su número, si aquella mujer lleva el celular a su oído, entonces es mi chica, a la que no dejo de esperar. Timbro... Espero... contesta una voz que dice: "deje su mensaje después de la señal".
Pruebo nuevamente marcando su número, si aquella mujer lleva el celular a su oído, entonces es mi chica, a la que no dejo de esperar. Timbro... Espero... contesta una voz que dice: "deje su mensaje después de la señal".
Es en ese instante que me sorprende la cuarta campanada.
Continuará...
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