Eric Clapton: Unplugged

Quién diría que ya casi pasaron 29 años desde la publicación de este memorable álbum. Porque una cosa es ser reconocido con una buena canción, y otra es triunfar con todo un álbum; posible para muy pocos músicos, y son justamente los que pasan a ser leyenda. Uno de ellos se llama Eric Clapton.

Eric Clapton - Unplugged (Versión extendida)

Corría el año 1992, era yo un simple adolescente que disfrutaba la música que nadie más gustaba, pasaba los días leyendo, jugando ajedrez, programando en la computadora, aburrido en las clases que cursaba en el último año escolar. Perú comenzaba a salir del desastre económico al que nos llevó el incompetente y peor presidente de la historia nacional: Alan García Pérez.

 

En ese año, Eric Clapton rodeado de músicos talentosos, grabaron una presentación en vivo que se convertiría en un álbum, que de la mano de Tears in heaven, llegaría a la cumbre musical, a los 6 Grammys y a convertirse en uno de los 40 álbumes más vendidos de todos los tiempos.

Aún conservo el cassette y el CD, ya como reliquias del pasado.

Inicia con un sencillo y animado tema instrumental que nos introduce al álbum, aunque poco sincero, pues hay canciones que pueden partirte el corazón, como sucede con el tema principal: Tears in heaven, canción inspirada en el trágico deceso de su hijo de 4 años. Clapton dejó todos sus sentimientos en esas líneas y acordes.

 

En esos años no existía internet con acceso público, no recuerdo cómo es que me enteré de aquella noticia en 1991; pero que el niño de 4 años de un famoso caiga desde el piso 52, hace eco en todo el mundo.

Pensar que vamos por la tercera canción del "lado A", ¡y ya tenemos tremendo recorrido! Pero espera, recién empezamos.

 

Es que parece que esta producción favoreció a los temas impares, porque la quinta es un blues de esos que te hacen pensar y —curiosamente— también cantar: Nobody Knows You When You're Down and Out. No te pierdas el punteo de Eric Clapton y esa voz rasposa que fluye desde su garganta. 👍

Luego, damas y caballeros, con ustedes: Layla. La última canción en el lado A del cassette. ¡Tremendo tema! ¿Acaso la mejor? Es que Clapton andaba inspirado cuando la compuso. ¿En quién pesabas, Eric? ¡Confiesa! Otra vez debo enfatizar que no te pierdas el punteo en su guitarra acústica. De principio a fin, se siente el vigor, la emoción, pero nunca me gustó que el final de esta canción contrastara con el resto del tema, siento que pierde vitalidad.

El lado B inicia con otra canción de esas que te arrancan un latido del corazón, una de esas que aunque no te llene de tristeza, sí que te mueve, sí que te hace pensar, sí que te hace cantar... ¡Y por dios que es mejor conocer la letra para cantarla! Pero puedes disfrutar Run on Faith con algún cigarrillo, o una copa de vino añejo, o las dos... Por que el lado B es  fantástico, ¡puro blues! Olvídate si no te gusta esta música.

I've always been
One to take each and every day
Seems like by now
I'd find a love who cares just for me

Ciertamente el último minuto no me llena, por esto no la considero la mejor canción de este Unplugged.

Para compensarnos la seriedad de las letras, Clapton se manda con Alberta. Un poco de piano nos viene bien. ¡Buen ritmo! ¿Cómo se baila Alberta? Me animo a intentarlo. ¿Me acompañas?

No te desanimes si no te convenció, aún queda San Francisco Bay Blues. Con esta la redondeas. Y es que el público la aplaudió de principio a fin. Con decirles que ya la estoy cantando... Esta canción es un clásico blues, muy conocida por los aficionados.

I got the blues from my baby left me by the San Francisco Bay,
The ocean liner's gone so far away.
Didn't mean to treat her so bad, she was the best girl I ever have had,
She said goodbye, I can take a cry, I want to lay down and die.

Después Clapton nos da un respiro, pero no será más que por 3 minutos. Porque se nos viene el mejor tema para mí: Old Love.

 

La voz de Eric Clapton no le falló. El acompañamiento del piano es preciso e incisivo, y la batería está ahí para enfatizar esos sentimientos. El solo con guitarra acústica finalizará profundo y delirante, con un Clapton alejado de su juventud, aunque experimentado, dará tremenda paliza a los guitarristas jóvenes que pensaban que "mientras más, mejor". Pero el solo de piano... ¡uuuffff, esto es blues llevado a todo el mundo! 

La última canción no sé cómo es que la incluyeron, no parece parte de la grabación en vivo.

Siento que el álbum no está bien balanceado, comprensible porque está grabado en vivo, pero me refiero a que incluyeron un par de temas muy nostálgicos y la musicalización está siguiendo aquella letra, arrastrándonos al tedio. Los recursos técnicos y profesionales están ahí, de sobra. No le daré nota a este álbum, solo digo que es de los cinco mejores que conozco en su totalidad, incluyendo su historia.