Crítica a Lo imposible
Si no recuerdas la película por el nombre, seguro recuerdas que filmaron una película contándonos algo referente al tsunami de 2004 en Tailandia. Pues a esta me refiero en este artículo.
Francamente me aburrí porque esperaba algo más "destructivo". Aún así, luego de cambiar mi postura inicial hacia la película, igual me aburrí.
Es que el final estaba "cantado" al minuto 20. Resultaba obvio que ningún miembro de la familia moriría. De esta forma se pierde el interés en el resto de la película; y cada encuentro familiar me confirmaba que —efectivamente— el final sería el más anunciado de la historia. La película es predecible por donde se la mire.
Pensé que vería una propuesta menos familiar y más franca, más real. Estoy seguro que el caso de 5 familiares vivos resulta realmente imposible, pero según parece: ¡fue posible!
Las actuaciones de Naomi Watts y Tom Holland transmitieron verosimilitud a sus personajes. También me gustó ver a Geraldine Chaplin.
Como nota curiosa, les comento que la conversación que mantuvieron Geraldine Chaplin con uno de los niños, donde este último afirma que no puede reconocer las constelaciones porque está en un hemisferio diferente, me pareció ridícula. El niño era, supuestamente, observador constante del cielo nocturno y claramente se ve la Osa Mayor en el cielo; además Tailandia y Japón, país de donde venía el niño, están en el mismo hemisferio.
En fin, no me gustó, no la recomiendo, a menos que te guste el cine llorón, el clásico cine "hollywoodense" sentimental. Es una película sin propuesta, no sensibiliza, no asombra, no es filosófica... es nada.
Francamente me aburrí porque esperaba algo más "destructivo". Aún así, luego de cambiar mi postura inicial hacia la película, igual me aburrí.
Es que el final estaba "cantado" al minuto 20. Resultaba obvio que ningún miembro de la familia moriría. De esta forma se pierde el interés en el resto de la película; y cada encuentro familiar me confirmaba que —efectivamente— el final sería el más anunciado de la historia. La película es predecible por donde se la mire.
Pensé que vería una propuesta menos familiar y más franca, más real. Estoy seguro que el caso de 5 familiares vivos resulta realmente imposible, pero según parece: ¡fue posible!
Las actuaciones de Naomi Watts y Tom Holland transmitieron verosimilitud a sus personajes. También me gustó ver a Geraldine Chaplin.
Como nota curiosa, les comento que la conversación que mantuvieron Geraldine Chaplin con uno de los niños, donde este último afirma que no puede reconocer las constelaciones porque está en un hemisferio diferente, me pareció ridícula. El niño era, supuestamente, observador constante del cielo nocturno y claramente se ve la Osa Mayor en el cielo; además Tailandia y Japón, país de donde venía el niño, están en el mismo hemisferio.
En fin, no me gustó, no la recomiendo, a menos que te guste el cine llorón, el clásico cine "hollywoodense" sentimental. Es una película sin propuesta, no sensibiliza, no asombra, no es filosófica... es nada.
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