Silencio
Me quedé en el silencio de los desilusionados, en las tristes melodías de la decepción, en la espera de un amor más elevado, y en la noche oscura de mi corazón.
Cómo podría decirle al mundo, que la lujuria es el final del camino para un enamorado; que el desenlace final de una noche de pasión, es el triste fraude de gente sin amor.
Que la esperanza anida en la mente del afligido, como un lejano horizonte alcanzable; pero se vuelve un sentimiento que desgarra el pecho, cuando sólo encuentra soledad después de su oración.
Es la sombra que me persigue en el camino, la muerte de una corta vida, la triste tentación. Más escucha en el silencio la templanza de mis versos, porque son conjuros que los pronuncia un adepto.
Volaré muy lejos ante la nimiedad, pues no se esconde del mundo aquel que prefiere no vivir entre el vulgo y la normalidad; más bien vive ajeno al dualismo, casto de una sociedad que jamás lo entenderá.
Piérdete en el mundo, ¡oh, profano amor! Que elegiste el fruto prohibido del placer más breve, que bebiste descuidado del vino dulce del deseo, danzando entre mis blancas sábanas, pero tiñéndolas de rojo con tu pasión.
Basta ya de tentaciones, cortina que cubre el estertor del amor. Retira de mí tu cáliz sangriento. Fúndete en el recuerdo de lo que no se vivió. Porque prefiero arrancarme el corazón del pecho, que dejarme engañar con tu seducción.
Basta ya de tentaciones, cortina que cubre el estertor del amor. Retira de mí tu cáliz sangriento. Fúndete en el recuerdo de lo que no se vivió. Porque prefiero arrancarme el corazón del pecho, que dejarme engañar con tu seducción.
Tat Parina: "Beethoven Silence"
Y que es él amor entonces?
ResponderBorrarhttps://odiseavirtual.blogspot.com/2013/08/que-es-el-amor.html
BorrarEntonces amor es generación, alumbramiento.
BorrarEl amor es un medio, no un fin. Sufrimos porque no obtenemos lo que deseamos, así lo dijo Buda. Y decirlo parece fácil, pero vivirlo es un tormento, sin embargo estamos aquí para superarnos.
BorrarRecuerdo de niña, pensaba que debiéramos vernos unos a otros como llamas, como luces y el amor sería sin duda de aquella mas vívida para cada uno y ello la libera del aspecto físico. Aprecié entonces la llama del conocimiento y las virtudes creyendo que era amor. Hoy entendí que eso era seducción. Cómo amar sin conocer y apreciar la llama de uno mismo? Y aprendí que el camino del amor empieza en "nosce te ipsum" y la propia aceptación. Se puede amar a mas de uno y pretender su compañía pero sin anular la propia. Se puede amar reconociendo esa llama y alejándose si esto le permite brillar más. El reto está en encontrar la llama que avive la nuestra y juntas andar más sin que una extinga la otra.
ResponderBorrarSin dudarlo: la expresión en el oráculo de Delfos es válida en el amor.
Borrar