Crítica a John Wick: Capítulo 4
Espectacular película que desde este momento se convierte en la mejor película de acción del año. No importa lo que esté por venir, no creo que sea posible superarla. Tuve que verla dos veces en el cine para estar seguro de esta afirmación. No defraudó, me gustó desde el primer minuto, hasta el último.
Pero sí hay algunas bemoles que debemos recalcar y reconocer. Empecemos desde el hoyo avanzando hasta la cumbre.
Las exageraciones cometidas en JW3 se mantienen en este cuarto capítulo, y me refiero a aquellas que definitivamente no aceptaríamos, como cuando JW cayó desde el techo del Continental a la calle; si bien solo fueron 2 ó 3 oportunidades, llegan a distraer al público más objetivo, dentro de lo que cabe la objetividad en una película de acción extrema como esta.
El mismo personaje JW ya está un poco gastado, no por su mal trabajo, si no porque su personalidad es parca y nada expresiva, contrastando con la variedad heterogénea de personajes que aparecen en esta película.
Se extrañaron las coreografías sin armas, se sintió la ausencia de las peleas a mano limpia, tan inteligentementes desarrolladas en JW3, que las llevaron al reino de lo imposible.
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La música nos ayudó a seguir el ritmo de toda la película y en los mejores momentos estuvo omnipresente, tanto que a pesar de la acción era imposible no notarla.
La coreografía en general estuvo muy bien, por momentos estuvo deliciosa; pero cuando fue impredecible se volvió apoteósico. Esas escenas se magnificaron con un trabajo de cámara esforzado, novedoso, con ángulos y tomas que no recuerdo en otras películas. Serán inolvidables.
Los nuevos personajes resultaron interesantes y complementaron un desarrollo que sí los necesitó. Particularmente me gustó Scott Adkins en el papel de Killa, fue fresco y sorpresivo, además este actor es conocido por su trabajo marcial, y el personaje sí que fue una revelación, ni reconocí a Adkins.
Incluyeron actores reconocidos que no decepcionaron, mas bien aumentaron las posibilidades de éxito de JW4.
Donnie Yen (Caine) es muy ágil y hay que recordar que tiene 60 años, además de su trabajo como actor. Clancy Brown, Ian McShane e Hiroyuki Sanada estuvieron tan bien, tan profesionales, es todo lo que esperábamos de actores de este nivel. En cuanto al trabajo de Bill Skarsgård, pues fue vistosa su interpretación y ese personaje lo extrañaremos, gracias al actor.
Particularmente me gustó la coreografía de Rina Sawayama (Akira), es decir su trabajo marcial, superior al de Halle Berry en JW3; lástima que aún tiene por mejorar su actuación.
No se puede dejar de destacar y felicitar la fotografía y los escenarios. No hay duda que la dirección fue superior y se refleja en cada minuto de JW4.
7.5/10. Gran cierre para la tetralogía de John Wick. Keanu Reaves ya es inmortal.
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