Protestas contra el espurio Plan B de López Obrador

Recuerdo cuando el Presidente Mexicano se bañaba así mismo con el agua sagrada que mana desde la moralidad, para terminar acusando al actual Gobierno Peruano de espurio (RAE: bastardo, falso).

Pero bastaron tres días para observar cómo este político solo en apariencia se bañaba de la sacra virtud, porque lo cierto es que se embarra en el lodo espurio de la ambición (¿o corrupción?), así como lo hace un marrano cuando se revuelca gratamente en el lodo del corral.

Porque podría pensar yo, después de leer el "célebre" Plan B, que se intenta favorecer alguna candidatura próxima (como la del mismo López Obrador). No sé, es una suposición.

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Y aunque mis palabras deberían tomarse como una licencia literaria, la vox populi de México debería tomarse seriamente, sin importar que el Presidente López afirme que la población mexicana está siendo manipulada y confundida.

Entonces, ¿debemos suponer que solo este Presidente y sus acólitos pueden percibir la verdad, así como los iluminados ven con un tercer ojo? ¡Por favor! Ya deje la minomanía y la falsedad, deje de manipular y confundir, es decir: deje de ser un presidente espurio.

Pero no me crean a mí, créanle a los medios de comunicación que cito a continuación, además de otros muchos que me cansaría de copiarlos en mi artículo.

Pero más que a estos medios: créanle a los miles de miles de ciudadanos.

Las manifestaciones contra el Plan B tienen una convocatoria varias veces superior a las que ocurrieron en Perú durante las semanas pasadas, solo que en estas ya se comprobó la compra de voluntades con sueldos para muchos de los manifestantes violentos.

López Obrador aducía que las cifras de una encuesta manifestaban la desligitimización del Congreso y de la Presidente Peruana, por lo que deberían renuciar (ipso facto). Bien, con esa lógica del Presidente López, al ver las calles de México repletas de ciudadanos contrarios al Plan B que él impulsó, debería él mismo retractarse.

En fin, la hipocresía sin límites de un personaje espurio.

Pero como ya dije antes, las críticas vertidas en este artículo solo son una muestra literaria, o quizás un juego de palabras para demostrar la versatilidad del idioma.

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