Crítica a El Callejón de las Almas Perdidas

El director Guillermo del Toro adaptó la novela de título homónimo, contándonos una historia sórdida, marcada por un derrotero de ambición y vicio, que podría no ser muy diferente, salvando los extremos, de las vidas que vivimos.

Es una película de cine negro, siniestra, donde no falta el suspenso. Aunque 150 minutos me parecieron largos, creo que sí fueron necesarios para contar bien la historia.

Bradley Cooper cumplió con un papel que le caía como anillo al dedo, ya saben, este actor tiene talento para los papeles de arrogante. A Cate Blanchett la vi demasiado seductora, pero ese era el papel.

Se agradece la presencia de Willem Dafoe y Ron Perlman, siempre actores muy queridos para el público, además de talentosos.

No quiero adelantar algo de la película, porque la recomiendo encarecidamente. Cualquier cinéfilo que se tome en serio este adjetivo debió ver esta película, y cualquier persona que guste del cine psicológico o suspenso, debería tenerla en su radar como mínimo.

El potente final redondea todo el drama que veremos y la considero la mejor escena de la película, donde Cooper se lució. Estuve pensando las últimas 24 horas en ese claustrofóbico final; final insoportable pero ineludible. Entre paréntesis solo puedo exclamar: ¡Dios, qué horrible, qué dolor!

Debo aclarar que la historia no es karma en acción, sino causa y consecuencia. No hay fuerzas místicas o divinas en todo esto, simplemente es libre albedrío.

7/10. Indispensable. No apta para niños.

Tal vez merece mejor puntuación, reconozco que es una sobresaliente producción, con buen argumento, desarrollo y ambientación; pero se me hizo un poco larga. Debo decir que está nominada al Oscar por mejor película.