La música andina no ha muerto

Hoy encontré la música de un grupo antiguo y olvidado entre los anaqueles de la música andina. Mi padre, amante de la cultura y de la calidad, escuchaba esta música y otras más cuando yo era un niño, de tal forma que entrando a mi adolescencia, los discos de vinil y los -por aquel entonces- modernos casettes, eran mi entretenimiento personal, podía escuchar a Inti Illimani, a Santana, a Morricone, a Bach, Pavarotti, Clayderman, cantar con Parchis, Jorge Cafrune, el Cholo Berrocal, Hector Lavoe, Manuel Donayre, Village People, The Beatles y tantos otros más que no podría acabar de mencionar, pero nunca dejaría de lado a Roberto Carlos, el mejor cantautor de toda la historia musical que conozco.

Recuerdo que la canción "Todos Juntos" era un tema espectacular, el magnus opus del legendario grupo Los Jaivas, hasta se decía que la letra fué compuesta por Pablo Neruda mientras visitaba Machu Picchu. Pero el álbum "Alturas de Machu Picchu" de Los Jaivas sí se inspiró con la letra de Pablo Neruda, contó con la presentación de Mario Vargas Llosa y las voces de Mercedes Sosa y Chabuca Granda.

¿Y qué hay respecto de la música que encontré hace pocas horas? Pues que luego de buscarla por años la conseguí de forma casual, en un último intento ahogado que no esperaba frutos. ¿Será por esto que soñé que tocaba una quena hace pocos días? No lo sé. Pero si sé que el Grupo Arco Iris interpretaba deliciosamente la música folclórica latina ¡Que manera de hacer hablar esa quena en "El Picaflor"! Sin lugar a dudas fue uno de los mejores grupos del pasado.

Uno de sus discos lo he tenido siempre en mi casa en el formato de 33 RPM y en el casette de respaldo respectivo. Lástima que no podía disfrutar de su música porque no consigo la aguja para el tocadiscos y los reproductores de cassettes ("caseteras") que tengo en casa ya no son fiables, porque hace 6 años acabaron con uno de mis casettes de Roberto Carlos, precisamente el que tenía mayor valor sentimental para mi.

Pero hagamos un recuento histórico de estos grandes grupos desconocidos por las generaciones actuales, salvo contadas excepciones.

Argentina. Si hubo un país de gran aporte a la música en general, ese es Argentina. Todos recordamos a los Chalchaleros, pero existieron Los Calchakis y el maestro de la quena, Uña Ramos, uno de los dos mejores quenistas que he oído. Aunque no es fácil reconcerlos como un género andino, no puedo dejar de mencionar a Jorge Cafrune y al mejor folclorista argentino: Atahualpa Yupanqui, sus temas son muy tradicionales, muy propios de la gente cercana al campo.

Bolivia. ¿Alguien no ha escuchado a Los Kjarkas o el nombre de Savia Andina? Los primeros tienen un tema conocido mundialmente llamado "Llorando se fue". Ambos grupos son puristas, así como tantos otros grupos bolivianos, lo nos garantiza que la tradición original aún vivirá por mucho tiempo más. No dejemos de mencionar a Proyección con sus buenísimos temas y al rico Grupo Bolivia, este último no sólo porque hace buena música, sinó porque es inusual ver un grupo femenino de música andina y de talla internacional.

Chile. Si alguien escucha música andina con letra de interés social, puede decir que es un grupo chileno de los 60's ó 70's y casi no podría fallar. Qué años tan difíciles vivió el pueblo chileno, no hay duda que la realidad de aquella época influenció en esta música ardiente y de mirada firme. Hubieron grandes como Víctor Jara, Inti Illimani, El Temucano, Los Jaivas, Illapu y otros que no los tengo en mente en este momento. El álbum "Canción para matar una culebra" de Inti Illimani es uno de mis preferidos en el género andino.

Perú. El folclor andino en este país vivió varios siglos de cautiverio por la discriminación del conquistador y del criollo hacia lo autóctono. Pero este arte musical no nació para ser olvidado y el Perú comienza a valorar a las culturas milenarias que le precedieron. En Ayacucho existen varios ritmos andinos auténticos y vivaces. La música puneña sigue incólume a pesar del tiempo. Hoy, y sólo en Perú, se puede escuchar fusiones musicales andinas, difundidas y exitosas. El grupo que masificó esta música en los 80's fue Gaitán Castro, con temas inovidables e insuperables, además de contar con un impetuoso en la quena; existe una melancólica Dina Paucar, un romántico William Luna, un místico Alborada, un talentoso Antología, un expresivo Max Castro y nuevos valores ya consagrados como Pelo de Ambrosio y el recorrido Lucho Quequezana; antiguas glorias como Luis Abanto Morales y Raúl García Zárate; la voz única en cualquier género musical de Yma Sumac; olvidados como el Grupo Arco Iris; desconocidos como Espíritu Andino; temas mundiales como "El Cóndor Pasa", "Vírgenes del Sol", etc.

Es probable que la música andina haya recibido sus primeras notas hace 5,000 años, en la cultura Caral, con los primeros intérpretes y compositores que tocaban flautas construidas con huesos de cóndores, y cuyos temas parecen más espirituales que festivos o sociales.

Pero la música  andina tiene su futuro asegurado en Bolivia y Perú, en el primero se cultiva la música más tradicional, la conocida mundialmente; mientras que en Perú, aún teniendo música tradicionalmente andina, también se experimenta con mezclas y proyectos de gran perspectiva que ampliarán esta música a  nuevos oyentes, a la nueva generación criada frente a la pantalla de un computador. Pero se siente un vacío sustancial sin esa música de la Nueva Canción Chilena y de los recordados talentos argentinos. A veces me parece que la música andina ha perdido su espíritu elevado y metafísico; pero seguro que me estoy equivocando.

Cerraré el tema con un comentario muy acertado por un forista, luego de escuchar "Alturas":
Inti Illimani nació en Chile pero dejo de serlo muy temprano, como tantos otros; como Los Kjarkas, Yupanqui, Cafrune, Chabuca, El Zambo Cavero, Luis Eduardo Bermúdez, Ali Primera, Zitarrosa, Jara, Silvio y Pablo, Chico Buarque y tantos otros, se convirtieron en latinoamericanos y nos pertenecen a todos nosotros. (Daniel Saavedra)