El 26 de agosto cumplí trece años escribiendo para mis blogs. Curiosamente, la primera publicación no figura como primera, sino como séptima, y se titula A mi primer amor . Sucedió que la publiqué pero la borré y la re-publiqué algunas semanas después. No en este blog, fue en otro donde sólo publico poesía. Odisea llegaría un año después. Fue una gran amiga en Nicaragua quien me animó a escribir. Mirando hacia el pasado, parece que solo apretó un botón y comencé a hacerlo... hasta el día de hoy. No sólo me gusta escribir, es todo un proceso que me llena y me vacía al mismo tiempo. Me permite investigar, aprender, afianzar, crear, escribir, manifestar, desfogar, compartir y más. Llego a comunicarme, a expresarme con mi arte. Es inagotable, no me aburre ni me agota. Hoy que releo ese primer poema, noto ese entusiasmo juvenil, ese ímpetu inmaduro, madera en potencia, fuerza natural, como un volcán que explota en emociones, que aún me llena como lo hizo hace 13 años. Aho...